martes, 13 de febrero de 2007

ERASE UNA VEZ...UN ESCULTOR SIN PIEDRA QUE TALLAR.


Así que ese escultor que no tenia una piedra con la que crear su arte, decidió esculpir su cuerpo aun sin ser consciente de que el cuerpo humano es mucho mas duro y difícil de modelar que la misma piedra... y que además su trabajo y su arte desde ese momento iba a ser catalogado de egocentrismo.
Modelar un cuerpo es un arte que te lleva toda la vida ya que la "materia prima" con la que trabajamos esta expuesta a cambios constantemente y no solo hablamos de cambios físicos ya sea por desajustes en la alimentación, desajustes hormonales, desgaste por la edad, enfermedad etc etc... si no también a nuestros cambios psiquicos, ya que todo los psiquico nos deja un sello físico, una huella, un "recuerdo".
Nos vamos convirtiendo en lo que vamos asimilando conforme pasa el tiempo, y los que llegan a viejos llevan escrita toda su vida en el cuerpo... los excesos de juventud, vicios, adicciones, depresiones, trabajos, estrés...
Como me dijo una vez un profesor, cuando nacemos somos como una sabana blanca planchadita y lisa tendida en el suelo de una habitación, a la que conforme va pasando el tiempo vamos arrugando poco a poco agarrándola con el puño de nuestra mano...ahora arrugamos de aquí, ahora de allí, ahora del centro... al final la sabana acaba siendo un pegote arrugado en el rincón de esa habitación.
Indudablemente hay una parte de deterioro inevitable ya que el tiempo no pasa de gratis para nadie, pero... "no es lo mismo un coche clásico y antiguo que un coche viejo de desguace " aun teniendo en cuenta que el clásico es probable que tenga mas años.
En las personas pasa algo similar..de todo lo que llevamos a cuestas yo diría que hay mucha parte que no es el desgaste propio de la edad.
Se nos "olvida" cuidar al vehículo con el que circulamos por la vida, no "tenemos tiempo", pero si lo tenemos para mantener el coche reluciente, tener nuestro mecánico de confianza, no fallar las revisiones y siempre miraremos de ponerle el combustible adecuado, no sea que se le atrofie el motor.
porque ¿y nuestro combustible?.. ¿usamos el adecuado? ¿con que baremo medimos eso?... solo con el baremo de a ver que alimento me proporciona mas placer y así de paso mientras la industria se enriquece con sus manipulaciones de marketing yo me jodo el motor?... porque claro... ¿y nuestro motor?
Así que..ese escultor que no tenia piedra que tallar y que empezó a cincelar su cuerpo, en el avance de su trabajo descubrió ... que necesitaba ayuda, demasiado trabajo para él solo, así que decidió meter a su alma en el proyecto y ambos acabaron la obra maestra, la escultura mas hermosa jamás creada.... el ser humano.

1 comentario:

querida_enemiga dijo...

Estoy segura de que leeremos cosas muy interesantes por aquí.

A propósito del Marketing y de las mentiras de la industria, te invito a que leas esto en mi blog, a ver qué te parece:

http://laventanademialma.blogspot.com/2007/02/mentiras-y-el-marketing.html